PAPA FRANCISCO: MISA PARA EMPLEADOS DE LA LIMPIEZA Y JARDINEROS

 El Papa Francisco celebró ayer por la mañana la Santa Misa para los encargados de la limpieza y los jardineros que trabajan en el Vaticano. Fue una verdadera sorpresa para los más de 30 empleados que acogieron con alegría la invitación del Santo Padre en la capilla de la Casa de Santa Marta. Con este gesto, el Papa Francisco ha querido reconocer la importancia de estos trabajadores y la dedicación con la que realizan su labor. Terminada la misa, el Santo Padre los ha saludado uno por uno. Luciano Cechetti, responsable del servicio de jardinería y limpieza del Vaticano, explica el trabajo de estas personas que todos los días mantienen limpia la plaza de San Pedro y cuidan con esmero las plantas de los jardines: Habitualmente, somos “invisibles”. Encontrarnos ante el Santo Padre, en una Misa especial para nosotros, es algo que no sucede todos los días. He visto las caras de los empleados: casi todos hemos salido de la misa con los ojos brillantes por la emoción. Ha sido una Misa muy simple, en contacto directo con quien ha sido elegido Pontifice hace pocos días. Se lo hemos agradecido muchísimo, especialmente cuando nos ha saludado al final: hemos sido presentados uno por uno al Papa Francisco, y él ha tenido una palabra especial para cada uno de nosotros. Y a todos nos ha dicho: “Rezad por mi” .  En la homilía, el Papa reflexionó sobre el Evangelio del día, que narra el episodio de los judíos que querían lapidar a Jesús y recogían piedras para hacerlo: Si tenemos el corazón cerrado –dijo el Papa Francisco-, si tenemos un corazón de piedra, las piedras nos llegan a las manos y estamos dispuestos a lanzarlas contra los demás. Por eso es preciso abrir el corazón al amor. Como es su costumbre, al final de la Misa el Papa se sentó en los bancos con los demás fieles, en una de las últimas filas, para rezar durante unos minutos. El pasado jueves, el Papa celebró la Misa para los dependientes de la casa de Santa Marta.