El Papa distribuirá la Comunión a los fieles directamente en la boca y puestos de rodillas, para incrementar "la devoción y el misterio", según ha adelantado el maestro de ceremonias del Vaticano, Guido Marini.
No es la primera vez que el actual Sumo Pontífice retoma viejas tradiciones de la eucaristía. El año pasado, Ratzinger resucitó la misa en latín y, el pasado enero, celebró una misa de espaldas a los fieles. Ahora, le toca el turno a la Comunión.
"Creo que será así. No hay que olvidar que la distribución de la comunión en la mano estodavía desde el punto de vista jurídico una dispensa a la ley universal, concedida por la Santa Sede a aquellas conferencias episcopales que lo pidieron", afirma el arzobispo Marini en una entrevista que publica el diario vespertino vaticano L'Osservatore Romano.
Marini recordó que Bedicto XVI ya había distribuido de este modo la Comunión durante su reciente visita a las ciudades sureñas italianas de Brindisi y Santa María di Leuca.
Según el Maestro de las Celebración Litúrgicas Pontificias, la modalidad adoptada por Benedicto XVI tiende a subrayar la vigencia de la norma, "válida en toda la Iglesia".
Con la distribución de la Comunión en la boca, agregó, se intenta resaltar "la presencia real en la Eucaristía, se ayuda la devoción de los fieles y se introduce con más facilidad el sentido de misterio, aspectos que en este tiempo es urgente recuperar".
Un nuevo Palio
El Maestro de Ceremonias también manifestó que a partir del próximo 29 de junio, festividad de San Pedro y San Pablo, Benedicto XVI cambiará el Palio (estola de lana, símbolo del obispo Buen Pastor) que usa en la celebración de liturgias solemnes por otro más corto y más práctico.
Precisamente, este nuevo Palio supone el adiós al que el propio Benedicto XVI introdujo al principio de su pontificado en homenaje a los usos del primer milenio de la Iglesia.
El nuevo Palio tendrá forma circular, cerrado, con dos puntas que caen en la mitad del pecho y de la espalda.
Mantendrá el color rojo de las cruces que le adornan y con él Benedicto XVI pretende continuar el desarrollo de esta prenda en los últimos doce siglos.
El que ha utilizado hasta ahora mide 2,60 metros de largo y se apoya sobre los hombros simbolizando la oveja descarriada, pero al ser tan largo le originaba problemas de movilidad.
El arzobispo Marini se refirió también a los cambios que Benedicto XVI ha efectuado ya en el báculo pastoral al adoptar el mismo que usara el papa Pío IX, que es dorado y en forma de cruz griega.
Este báculo es conocido como "Férula" y resulta "más ligero y manejable" que el introducido por Pablo VI y posteriormente utilizado por Juán Pablo I y Juán Pablo II, y también por el actual Papa al comienzo de su pontificado.
Según Marini, esto no supone un regreso a lo antiguo, sino un desarrollo de la tradición romana, que siempre fue en forma de cruz y sin crucifijo.
http://www.elmundo.es/ elmundo/2008/06/25/ internacional/ 1214417655.html
http://www.elmundo.es/
No hay comentarios.:
Publicar un comentario