Síntesis de su vida
El R.P. Loring nació en Barcelona en 1921. Bisnieto de Jorge Loring y Oyarzábal e hijo del ingeniero Jorge Loring Martínez, estudió seis años en el Colegio de Ntra. Sra. del Pilar, de los marianistas de Madrid. En el verano de 1936, durante la Guerra Civil, los republicanos asesinan a su padre en Madrid. Se traslada a Málaga donde estudia el bachillerato en el Colegio San Estanislao de Kostka y regresa a Madrid para cursar ingeniería en la Escuela Técnica Superior de Ingeniería (ICAI), ordenándose sacerdote en 1954, a la edad de 33 años.
Reconocido por sus acciones de difusión y evangelización que durante muchos años ha realizado por televisión y radio, además de haber impartido conferencias por todo el mundo, ha escrito varios libros, siendo el más popular el titulado "Para Salvarte", que ha alcanzado la edición número sesenta y tres, superando el millón de ejemplares vendidos en España, siendo editado también en México, Ecuador, Perú, Chile, EE.UU., Egipto, Israel, Rusia, etc. Además de sus publicaciones, ha grabado algunas de sus conferencias en video, y ha aparecido en emisoras de televisión como EWTN.
Mi encuentro con él
Las vueltas que tiene la vida, ¿quién me iba a decir a mí?... que en estos dos últimos años lo iba a tener de vecino en el confesionario que está junto al mío en la Iglesia de Santiago Apóstol de Cádiz. Un apóstol de los grandes, un dignísimo hijo de san Ignacio de Loyola, que hasta sus últimos días ha sido incansable discípulo, apóstol y misionero de Jesucristo. ¿Cuántos como yo hemos crecido y nos hemos formado cristianamente con su libro "Para salvarte"?
Esta foto que les comparto (con su sonrisa amplia y el rostro lleno de Dios) es de cuando le realicé una extensa entrevista sobre su perfil y ministerio sacerdotal, entrevista –todavía inédita- que está repleta de sentidas anécdotas y reflexiones profundas sobre el sacerdocio y el celo por las almas, entrevista que se ha convertido para mí –al volver a escucharla en estos días- en un auténtico legado espiritual.
Luego de la misma nos encontramos innumerables veces en la Iglesia de Santiago Apóstol de Cádiz, donde estaba su confesionario, cercano al que uso habitualmente; y él yéndose o volviendo de confesar, yo por comenzar o habiendo celebrado la misa, nos encontrábamos compartiendo siempre edificantes conversaciones.
Hoy elevamos una oración por su alma al Dulce Niño de Belén, con la certeza de que pronto estará con Aquel a quien llevó por el mundo entero, “con alma grande y generosidad” al decir de san Ignacio de Loyola, con su vida dedicada a la evangelización y junto a su Madre, María Santísima.
Padre José Medina
Cádiz, Navidad de 2013.
QUE HACER A LA HORA DE LA MUERTE P. JORGE LORING S.J.
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